
En el número 18 de la avenida del Tibidabo resiste en pie la fachada ––solo la fachada–– de un antiguo palacete que fue la academia en la que impartía clases y componía el compositor Enric Granados hasta su muerte en 1916. La fachada, muy deteriorada, conserva los relieves de cuatro musas y la fecha 1911, año de su construcción, costeada por el mecenas doctor Salvador Andreu. Esta es la historia de hoy de mi serie Barcelona Secreta en Lavanguardia.com. Podéis leerlo en el siguiente enlace:


